El nombre del ex presidente Enrique Peña Nieto no pasó desapercibido durante la audiencia en la que la Fiscalía General de la República (FGR) acusó al ex procurador Jesús Murillo Karam de los delitos de desaparición forzada, tortura y contra la administración de la justicia por el caso Ayotzinapa.
Durante la formulación de imputación, la agente del Ministerio Público de la Federación, Lidia Bustamante, recordó, en primer término, que el 5 de octubre de 2014, la entonces Procuraduría General de la República (PGR), a cargo de Murillo Karam, atrajo la indagatoria por la desaparición de los 43 normalistas en la noche del 26 y madrugada del 27 de septiembre de 2014 en Iguala, Guerrero.
Enseguida, la fiscal hizo la primera referencia al ex jefe del Ejecutivo, al remitir a la conferencia de prensa realizada el 6 de octubre de 2014, en la cual Murillo Karam enfatizó que “la indicación de Presidente de la República, Enrique Peña Nieto, es que, con toda la fuerza del Estado, actuemos para encontrar la verdad”.
Esta frase del entonces titular de la PGR fue repetida varias ocasiones por los representantes de la Fiscalía General de la República como parte de sus alegatos en contra de Murillo Karam durante la audiencia de este sábado en el Centro de Justicia Penal Federal del reclusorio Norte.
Antes de concluir su exposición, la fiscal Bustamante hizo la segunda referencia al ex presidente Enrique Peña Nieto cuando acusó al ex procurador Murillo Karam de “orquestar” la detención de cuatro presuntos involucrados en la desaparición de los normalistas de Ayotzinapa, quienes, con sus confesiones, sostendrían la narrativa de la llamada “verdad histórica”.
Esto, abundó la fiscal, “mejoraría” la “percepción de la ciudadanía”, pero, sobre todo, ayudaría a detener las movilizaciones que se estaban realizando en la Ciudad de México y en otras partes del país por el caso Ayotzinapa, justo un par de días antes de que los padres de los 43 normalistas se reunieran con el entonces presidente Enrique Peña Nieto.
(milenio.com)