La abogada Alba Jaramillo sostuvo que más del 90 por ciento de los migrantes solicitantes de asilo político ante autoridades migratorias de Estados Unidos no logran concretar el trámite debido a la falta de pruebas.
La también directora Ejecutiva de Inmigration Law and Justice Network declaró lo anterior tras encabezar en Nogales, Sonora, una ceremonia de reconocimiento a los migrantes durante el Día Internacional de los Refugiados.
El evento fue celebrado sobre la calle Internacional, frente al muro fronterizo entre Sonora y Arizona.
Como litigante, dijo tener conocimiento que miles de migrantes son aceptados por las autoridades migratorias estadunidenses, aunque los reciben y se los llevan detenidos para ponerlos en proceso de deportación.
Después, algunas organizaciones civiles los apoyan con el trámite de asilo, pero las personas piensan que solamente con cruzar y recibir un permiso humanitario ya consiguieron el asilo.
“No es así, es un proceso que dura muchas veces hasta por lo menos diez años y poder comprobar que tienen un caso de persecución para el asilo es muy difícil, por lo que más del 90 por ciento de los solicitantes no ganan su caso, porque es muy difícil comprobar, más cuando llegan sin pruebas por venir huyendo de sus países de origen”, explicó.
Manifestó que tras la remoción del Título 42 en Estadis Unidos hay cierta tranquilidad, pero el sistema existente actualmente tampoco funciona y los migrantes deben usar la aplicación CBP One, aunque es una espera larga y la misma aplicación no funciona todo el tiempo, mientras los migrantes duermen en la calle y sus vidas corren peligro en las frontera.
Jaramillo añadió que la exigencia es un sistema más efectivo y humano, en el cual las personas tengan el derecho de cruzar inmediatamente porque ser migrante solicitante de asilo y estar en la frontera no es seguro.
Además, es un derecho humano exigir asilo, apuntó la abogada.
“El albergue con el que trabajamos cercanos, la Casa de la Misericordia, les da hospedaje a los solicitantes de asilo, cuando alguien necesita un lugar seguro, se les ofrece ese lugar, pero la verdad muchos de ellos están en la calle, no seguros y buscar lugar donde vivir, rentan departamentos que tampoco son seguros y muchos son controlados por el crimen organizado”, advirtió.
Jaramillo detalló que, afortunadamente, la presencia de migrantes en espera ha bajado, ya que se aproximan días de altas temperaturas, las cuales ponen en riesgo a las personas que en ocasiones no tienen ni para comer.
Ella también colabora con otros organismos internacionales como la Colisión de Derechos Humanos, el albergue La Casa de Misericordia y el Confluence Center de la Universidad de Arizona.
“Lo que estamos haciendo es trabajar en una serie de proyectos que se llama Fronteridad, para intentar cambiar la narrativa de la frontera, hoy es un dia muy especial, el Día Internacional de los Refugiados y estamos aquí para enseñarles el muro que se les creó, enseñarles el valor a todos los solicitantes de asilo que están aquí en la frontera, buscando un lugar seguro para sus familias”, dijo.
(milenio.com)