La legitimidad es fundamental en cualquier sistema de justicia penal, aseveró George Gascón, fiscal de Distrito de San Francisco, California, en Estados Unidos.
Durante el Encuentro Internacional sobre la Reforma al Sistema de Justicia Penal: Experiencias Comparadas, refirió que esta legitimidad tiene que darse de cara a cualquier nivel socioeconómico de la población.
Se debe “tener un sistema de justicia que la comunidad apoye y que el público crea que sea serio. Debe tenerse una legitimidad, el sistema tiene que ser un sistema que todos crean que trabaja para él, más allá si es pobre o con una alta posición”, expuso.
Para ello es necesario que este sistema cuente con una transparencia en todos sus ámbitos, desde el desarrollo de los procesos judiciales hasta en el manejo de los recursos.
De ahí que este sistema debiera: uno, reparar el daño a la víctima, siendo recompensada y tratada con respeto; dos, reparar el daño a la comunidad, su impacto, y tres, mirar al acusado.
En este último caso, Gascón reconoció que uno de los problemas que continúa enfrentando Estados Unidos es la falta de atención al acusado y que puede provocar una reincidencia del crimen.
Señaló que en la actualidad el sistema judicial estadunidense busca cómo reparar al individuo y reintegrarlo positivamente a la sociedad, pues el encarcelar a una persona no resuelve el problema.
“Las cárceles no son lugares de rehabilitación; en la experiencia, por lo regular la gente que va a la cárcel se pone peor, pues las cárceles se convierten como en un sistema de educación para el criminal”, subrayó el fiscal estadunidense.
De hecho, comentó, existen estudios en los que se comprueba que los acusados de un primer delito menor que socializan con los ya presos empiezan a cometer delitos más graves.
De ahí la necesidad de crear sistemas que no den oportunidad a las personas a convertirse en criminales, sino que brinden apoyo de científicos, trabajadores sociales y la tecnología, puntualizó el funcionario estadunidense.