El presidente Andrés Manuel López Obrador rechazó opinar sobre la marcha en contra del régimen cubano, encabezado por Miguel Díaz-Canel, que se realizará hoy en la islam, al asegurar que México no es injerencista; “es un asunto de ellos, que ellos resuelvan”, dijo.
Sin embargo, desde la conferencia mañanera, el jefe del Ejecutivo federal aprovechó para criticar la “asfixia” que Estados Unidos ha implementado contra el pueblo cubano con el embargo económico que “sigue vigente porque es inhumano”.
“Pues no intervención. Nosotros somos respetuosos de las políticas que se toman en otros países, no somos injerencistas, nosotros tenemos una política exterior que viene de lejos, que tiene que ver con la frase memorable del presidente Juárez: ‘entre los individuos, como entre las naciones, el respeto al derecho ajeno es la paz’. Es una política que está en el artículo 89”, argumentó.
López Obrador aseguró que no tiene opinión sobre las movilizaciones ni sobre la postura del gobierno cubano frente a éstas, porque son decisiones internas de otro país.
En tanto, consideró que lo que se debería hacer es cambiar la política general para que no haya represalias contra un pueblo al que reiteró su admiración por tener “la arrogancia de ser libre” frente a una política mundial que ha reinado en las últimas décadas.
“Eso es vil, canallesco, nosotros en México en los momentos difíciles que hemos atravesado por la pandemia recibimos apoyo de los mexicanos que viven y trabajan en Estados Unidos, nos apoyan enviando sus familiares recursos. (…) Por el bloqueo que hay en Cuba, los cubanos que decidieron vivir en Estados Unidos no pueden enviar a sus familiares apoyos, eso no me parece justo”, agregó.
Y, aunque dijo que “sencillamente no tengo opinión” sobre las movilizaciones, el mandatario matizó sus declaraciones al señalar que si trata el tema puede interpretarse que no es objetivo. A la vez, consideró que el que se pronuncie a favor de la libertad de ese pueblo “no afecta en nada”, porque la mayoría de los potentados apoya el bloqueo a la isla.
“Es cuando me dicen: ‘a ver, la autocrítica’, sí la hago pero tengo tantos críticos que ¿para qué yo voy a ahondar más si no hay equilibrios? Un periódico cualquiera en el mundo y todos en contra del pueblo, el gobierno cubano, no hay objetividad, no hay equilibrio”, acusó.
(milenio.com)