El presidente Andrés Manuel López Obrador hizo un llamado a la población a combatir problemas como la extorsión “entre todos”, tras el enfrentamiento entre pobladores e integrantes del grupo criminal Familia Michoacana, en el Estado de México, donde murieron 14 personas.
“Hay que cuidar mucho que no haya consumo de droga porque tenemos que combatir el narcotráfico y esto que está pasando, que ayer lamentablemente se dio en el Estado de México: la extorsión, el llamado pago de piso, todo esto lo tenemos que combatir, pero entre todos”, señaló el mandatario mexicano durante una gira que realiza en el sur del país.
Durante la presentación de programas para el Bienestar, en Pungarabato, Guerrero, el mandatario reconoció que en esta zona el crimen organizado “tiene fuerte presencia”, pero insistió en que entre todos se debe evitar el crecimiento en el consumo de drogas.
Las declaraciones de López Obrador se producen unas horas después del enfrentamiento entre presuntos criminales y pobladores en Texcaltitlán, Estado de México, que dejó 14 personas muertas, una decena de ellas integrantes del grupo criminal la Familia Michoacana, además de varios lesionados.
De acuerdo con reportes de la prensa local, el enfrentamiento surgió luego de que los pobladores denunciaran que fueron extorsionados por sujetos que se ostentaban como miembros de la Familia Michoacana, quienes les exigían pagos por cada metro cuadrado de siembra.
Ante esta situación, los habitantes se organizaron para confrontar a los criminales lo que derivó en el enfrentamiento.
Según un informe presentado este sábado por autoridades locales, entre los 14 muertos se encontraba el Payaso, líder de la Familia Michoacana en la zona y un par de sicarios “de alto o mediano nivel”.
Además, la gobernadora Delfina Gómez prometió que no habrá impunidad en el caso e informó que solicitará al gobierno federal, la “presencia permanente de las fuerzas federales en la región”, para cuidar y proteger a los pobladores.
La Familia Michoacana es uno de los grupos delictivos que operan en el país, los cuales se disputan a sangre y fuego el control de la producción y tráfico de drogas como la marihuana y metanfetamina, además de actividades como la extorsión a comerciantes, el secuestro y el robo a autotransporte de carga.
Los hechos ocurren luego de que México reportara una caída anual del 7.1 por ciento en homicidios en 2022, cuando México tuvo 30 mil 968 asesinatos tras los dos años más violentos de su historia, bajo el mandato de López Obrador, con 34 mil 690 víctimas de asesinato en 2019 y 34 mil 554 en 2020, seguidos de 33 mil 308 en 2021.
(milenio.com)