La lista de diputaciones plurinominales del PRI para la Cámara de Diputados generó disgusto entre varios partidarios del tricolor que exigen la renuncia del presidente nacional Alejandro Moreno y de prácticamente todo del Comité Ejecutivo Nacional (CEN), al asegurar que “el PRI se ha convertido en un partido familiar”.
Uno de los personajes que ha mostrado su descontento es el ex gobernador de Oaxaca, Ulises Ruiz Ortiz, quien en sus redes sociales catalogó como un acto de delincuencia organizada el hecho de que Carolina Viggiano y su esposo Rubén Moreira incluyeran a su hijo, Juan Pablo Beltrán, en la lista de candidatos plurinominales.
Además, aprovechó la oportunidad para pedir la renuncia de ambos dirigentes priistas e incluyó en dicha petición la dimisión de Alejandro Moreno, quien destaca como el primero en la lista y buscará obtener una curul por la cuarta circunscripción.
El enojo de algunos partidarios ayudó a que la corriente interna llamada Democracia Interna, la cual es encabezada por el ex gobernador de Oaxaca, emitiera un comunicado en el cual señalan que “el partido es cada vez más de unos cuantos y menos de sus militantes”.
Los inconformes argumentan que las familias de José Murat (cuñada e hijo) y de Moreira-Viggiano (esposos) acaparan cuatro de las 50 diputaciones plurinominales que el PRI tienen buenas posibilidades de ganar, siempre y cuando se ubiquen en un cálculo optimista.
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Incluso se acusó de que las nominaciones tienen una presencia importante de nepotismo, pues hay varios hijas e hijos “de los mismos de siempre entre los que destacan las candidaturas de los hijos de Emilio Gamboa, del gobernador de Campeche y de Jorge Carlos Ramírez Marín, la hija de (Ismael) Hernández Deras, que va por mayoría mientras él como plurinominal, así como el sobrino de Carlos Aceves del Olmo”.
La corriente Democracia Interna señala que nadie del CEN se quedó fuera de las nominaciones y que si éstos tuvieran “una pizca de decencia, deberían renunciar a sus cargos para irse a competir al territorio, empezando por el responsable de esta infamia, Alito Moreno”.
En el posicionamiento firmado por 84 priistas se explica que actualmente la militancia se entiende en el CEN como la cercanía con Alejandro Moreno: “incluir a tantos cortesanos de Moreno dejan muy claro la prepotencia del “líder” y su menosprecio por cuadros distinguidos que se quedaron esperando el reconocimiento a su trayectoria”.
Otra corriente interna del PRI como Democracia Social, emitió un comunicado en el que señalan que “los priistas de todo el país nos sentimos traicionados y muy ofendidos por una dirigencia que no solo incumplió su compromiso de recomponernos hacia el interior para servir a la gente, sino que ha llegado al grado tal de inmoralidad que se adueño de las candidaturas plurinominales para la elección de junio próximo”.
La carta firmada por Tomás López González señala que los priistas no pueden conformarse con tener esta clase de dirigentes, “que son capaces de robarnos el futuro y la esperanza de participar en la reconstrucción de un país que se cae a pedazos”.
Aunado al reclamo de las corrientes internas, en el portal change.org se puede ver una petición de firmas creada por Christian Garfias para los militantes del PRI exijan la renuncia de Alejandro Moreno. Hasta el momento dicha solicitud solo ha podido recaudar 36 firmas en 19 horas.
El viernes pasado MILENIO publicó que el PRI dejó fuera a representantes incómodos que destacaron en la administración de Enrique Peña Nieto y de los cuadros políticos formados desde el salinismo como Manlio Fabio Beltrones, César Camacho Quiroz y Emilio Gamboa.
(milenio.com)