Los proyectos de infraestructura tendientes a elevar la cobertura de la red nacional de gasoductos tienen un importante potencial para impulsar la competitividad del sector manufacturero, a través de un incremento de la oferta de gas natural a un menor precio, destacó el Banco de México (Banxico).
El instituto central expone que ello se podría reflejar, en el marco de la reforma energética, en una mayor generación de electricidad a partir de este energético, así como en una reconversión gradual del sector hacia tecnologías más limpias y más eficientes basadas en gas natural.
Sin embargo, precisa, para que se materialicen los beneficios potenciales de la ampliación de la red de gasoductos es necesaria una regulación que conduzca a un funcionamiento eficiente del sistema de transporte y distribución del gas natural, de manera que la provisión del energético alcance estándares en cuanto a costos y calidad.
En su “Reporte sobre las economías regionales, enero-marzo 2015”, el banco central señala que la participación del gas natural como fuente de energía en el sector manufacturero se ha incrementado en los últimos años.
Sobre todo, se anticipa que su demanda vaya en aumento y que reemplace en parte a otros energéticos de tipo fósil debido, principalmente, a su bajo costo en la región de América del Norte en relación con otras fuentes de energía y a que es menos contaminante.
En el documento, destaca el desarrollo actual de dos gasoductos que podrían contribuir de manera importante a satisfacer dicha demanda, Los Ramones Fase II y el Sistema Norte-Noroeste.
Además, señala que diversas ramas manufactureras y regiones se podrían ver más beneficiadas por la culminación de estos proyectos, ya sea porque usan de manera intensiva el gas natural o la electricidad.
El proyecto Los Ramones Fase II se extenderá por los estados de Nuevo León, Tamaulipas, San Luis Potosí, Querétaro y Guanajuato, tendrá una longitud de 740 kilómetros y contará con una capacidad para transportar mil 430 millones de pies cúbicos diarios del energético.
Por su parte, el Sistema Norte-Noroeste considera mil 780 kilómetros de extensión a lo largo de los estados de Sonora, Chihuahua y Sinaloa, y tendrá una capacidad para transportar mil 600 millones de pies cúbicos de gas natural por día.
Con datos de Petróleos Mexicanos y de la Secretaría de Energía (Sener), se estima que el incremento en la capacidad para transportar el energético asociado a ambos proyectos equivale a 45 por ciento del consumo total de gas natural en el país durante 2013, lo que podría representar un incremento sustancial en la provisión de éste.
Indica que de acuerdo con el Sistema de Información Energética (SIE) de la Sener, el consumo de gas natural representó 51.8 por ciento del consumo total de energía en el sector manufacturero en 2013, considerablemente por arriba de la participación que guardan la electricidad y los petrolíferos como fuentes de energía.
Además, el Banxico destaca que la participación del gas natural en el consumo total de energía registró el mayor crecimiento entre los diferentes energéticos utilizados por dicho sector durante el periodo 2003-2013.
Si bien el gas natural es la principal fuente de energía del sector manufacturero en México, aclara que la participación del mismo en el consumo de energía es heterogénea entre las ramas de la industria manufacturera que mayor energía consumen.
Entre éstas la petroquímica, la fabricación de vidrio, la industria química, la producción de cerveza y la producción de pulpa, papel y cartón, todas ellas con una participación del gas natural superior al 60 por ciento de su consumo total de energía.
Le siguen la producción de hule, la producción de hierro y acero, los productos del tabaco, los fertilizantes, así como la fabricación de automóviles y camiones, con una participación que fluctúa entre 35 y 60 por ciento del total de energía consumida.
El instituto central apunta que las ramas manufactureras más intensivas en la utilización de gas natural se podrían beneficiar directamente al tener acceso a un precio más bajo de este energético.
Por su parte, añade, aquellas ramas manufactureras que utilizan en menor medida el gas natural se podrían ver beneficiadas en la medida que sean capaces de sustituir sus actuales fuentes de energía por gas natural.