A menos de un mes de las elecciones presidenciales en Estados Unidos, las diferencias entre esa nación con China se mantendrán sin importar quién gane.
Así lo señalan especialistas de Moody’s, que además resaltan que México es esencial para la política industrial que desde Washington se defina.
“México se está volviendo esencial para la política industrial de Estados Unidos para fomentar el friendshoring y reducir el riesgo de interrupciones en la cadena de suministro”, comentó en un reporte la firma calificadora.
Los especialistas indican que es importante fortalecer la integración económica entre los países en sectores clave como automotriz, inmobiliario y telecomunicaciones, “que ya están bien integrados en la cadena de suministro de América del Norte”.
Sin embargo, México enfrentará importantes deficiencias como las limitaciones en infraestructura, la escasez de agua, la violencia y delincuencia, los obstáculos de políticas y la reciente reforma judicial que aún genera incertidumbre.
Por otro lado, remarcó que China recurre cada vez más al comercio y la inversión en el país para llegar al mercado de la Unión Americana, que ya es visible en los flujos comerciales. Si bien el comercio bilateral de México con Estados Unidos se expande rápidamente en los últimos años.
“México redujo su dependencia de las importaciones estadounidenses al aumentar las importaciones chinas a 19 por ciento desde casi cero hace dos décadas”, comentó.
Ante ello, señaló que el próximo gobierno estadounidense deberá abordar el aumento del comercio y la inversión de China en territorio nacional y la supuesta evasión del país asiático de aranceles mediante exportaciones a través de México.
Inversión en AL
Estados Unidos continúa como el principal inversionista extranjero de América Latina, pero la presencia comercial de China crece a paso firme en la región lo que preocupa a las compañías americanas, dijo Moody’s.
Detalló que la inversión extranjera directa (IED) de Estados Unidos en América Latina alcanzó los 1.6 billones de dólares en 2023, en comparación con unos 10 mil millones de China.
Sin embargo, el comercio entre América Latina y China creció a 469 mil millones en 2023, comparado con los 30 mil millones en 2003.
Moody’s destacó que China es ahora el principal socio comercial de Sudamérica y una fuente importante de préstamos, particularmente para proyectos en energía e infraestructura.
Sudamérica exporta principalmente a China soja, cobre, petróleo y otras materias primas que el país sostuvo necesita para su desarrollo industrial, e importa cada vez más maquinaria, equipos de transporte y otros productos manufacturados en el país asiático.
(milenio.com)