Los mexicanos gastan de su bolsillo unos 440 mil millones de pesos al año en salud, cifra que podría eliminarse o eficientarse con la participación de la aseguradoras.
Para ello, la Asociación Mexicana de Instituciones de Seguros (AMIS), en conjunto con Funsalud, presentó al gobierno federal una serie de iniciativas en las que podrían trabajar en asociación público-privada para la carga en salud a las finanzas y mejorar los servicios.
El presidente de la AMIS, Mario Vela, aclaró: “No estamos haciendo ninguna propuesta de privatizar nada (servicios de salud), sino una propuesta de cómo podemos trabajar en conjunto para buscar las eficiencias del gobierno y de las aseguradoras y sumar un ganar ganar”.
El coordinador del Grupo de Pensamiento en Participación Público-Privada en Salud, Funsalud, Miguel Ángel González Block, quien generó las propuestas del sector, indicó que la salud es fundamental para salir de la pobreza.
Dijo que en México 84 por ciento de la población tiene una forma de protección financiera en salud, con los institutos Mexicano del Seguro Social (IMSS) y de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE), así como otros organismos, y el Seguro Popular.
Sin embargo, abundó, cerca de 19 millones de personas carecen de protección y están expuestas a enfrentar con gasto del bolsillo las necesidades de salud, atención médica y hospitalaria.
“Si bien el gobierno ha hecho importantes esfuerzos en lograr que 84 por ciento de la población cuente con protección social, creemos que las aseguradoras ahora pueden lograr que se llegue al 100 por ciento”, dijo en conferencia de prensa.
En el último día de la 25 Convención de Aseguradoras de México (CAM), indicó que a pesar del número de población asegurada, el total del gasto de los bolsillos de los mexicanos en este rubro es de 44 por ciento del total de salud, es decir, 440 mil millones de pesos al año.
De este monto, 65 por ciento se debe a las ineficiencias de las instituciones públicas, lo que representa 25 por ciento del gasto total de salud, que es un total de 253 mil millones de pesos, indicó.
De acuerdo con el especialista, también se desperdician unos 70 mil millones de pesos al año que corresponden a los costos de las instituciones de salud para atender sólo la diabetes, y son casos que se pudieron prevenir con un mejor servicio, como se podría dar con un seguro de salud.
Así, la propuesta de las aseguradoras planea que el sector privado pueda manejar la prima del seguro popular, más la contribución familiar que hace el beneficiario con capacidad de contribución, para llegar al 16 por ciento no cubierto.
También se plantea lograr un aseguramiento de los microempresarios, lo que mejoraría la productividad, y complementar el Seguro Popular en los servicios que presta en la actualidad y ampliar los beneficios a los asegurados.
“Lo importante es que se considera que hay gran factibilidad en esta relación pública-privada, pero se requiere fortalecer la capacidad gestora del gobierno”, lo cual no requiere de cambios legislativos, pero si de reglamentación adecuada, explicó.