La Comisión de Arbitraje Médico de Oaxaca resolvió que hubo negligencia médica y omisión en el caso de la atención retardada a los tres menores que fueron mordidos por murciélagos en la comunidad indígena de Palo de Lima perteneciente a San Lorenzo Texmelucan, de los cuales dos murieron.
El presidente del organismo, Alberto Vásquez Sangerman, informó que luego de revisar las evidencias y las pruebas científicas, además de escuchar a los padres de las víctimas, se determinó aplicar una sanción a la Secretaría de Salud de Oaxaca por el caso, ordenando el pago de una indemnización y reparación del daño.
Además de aplicarse acciones para evitar la repetición de los hechos, instruyendo el equipamiento inmediato, dotación de medicamentos y asignación de médicos y enfermeras a la clínica rural donde no se atendió de primera instancia a los menores fallecidos.
De acuerdo al resolutivo emitido por el organismo los procedimientos y protocolos que siguieron los médicos pertenecientes a la Secretaría de Salud (SSO) en el caso, como fue la atención de primera instancia fue retardada lo que causó que se complicara el padecimiento, y generar la muerte de dos de los niños mordidos por los murciélagos.
De acuerdo con Vásquez Sangerman, desde el primer momento en que los menores contagiados por rabia silvestre fueron referidos por sus familiares ante los responsables de las clínicas y hospitales de su región, se debió haber actuado con rapidez y no generar una tardanza en la atención por parte de los médicos que los valoraron.
El ataque a los tres menores se reportó en su domicilio el 1 de diciembre del 2022, y pese a la petición de los padres, que acudieron a la clínica rural, y dos hospitales regionales, fue hasta el 21 de diciembre que los ingresan de urgencia al hospital general en la Ciudad de Oaxaca, donde ya su estado era crítico, y dos de los niños fallecieron.
La Comisión de Arbitraje Médico, adelantó que una vez emitida la resolución donde se comprueba que hubo negligencia médica, ahora le toca a la Fiscalía de Justicia proceder por la vía penal contra los médicos y enfermeras que presuntamente negaron la atención médica adecuada a los menores y dilataron su hospitalización inmediata.
En la carpeta de investigación de la Fiscalía anticorrupción pendiente de judicializar, se tipifica como delito en contra de los médicos responsables de la muerte de los niños mordidos por murciélagos, el delito de homicidio culposo, mientras que por la vía administrativa se contempla una sanción para los implicados de hasta 14 años de inhabilitación para ejercer cargos públicos.
(milenio.com)