Basilia N, víctima de Félix Salgado Macedonio, quien decidió denunciar la violación ocurrida en 1998, dijo que aunque el delito cometido ya prescribió, su testimonio debería servir para que Morena le niegue la candidatura: “Así pasen 100 años, para mí es como su hubiese sido hoy”.
Aseguró que si denunció 22 años después fue porque cuando ocurrió la violación ella tenía 17 años, pero dos años después, en el 2000, lo intentó hacer: “cuando dije a quien quería denunciar por violación, me dijo (el Ministerio Público), ‘tienes que irte a tu casa, esto no lo puedes denunciar, esta persona es muy influyente y poderosa. Vete a tu casa, y olvida esto’”.
Basilia relató su testimonio en entrevista con Azucena Uresti en Radio Fórmula y dijo que si decidió hablar ahora, veinte años después, es porque se enteró que ya como precandidato, Salgado Macedonio acudiría a su pueblo.
“En ese momento supe que no podría callarme y tenía que hablar porque ese señor iba a ser gobernador. No lo he vuelto a ver pero no soporto ni verlo en televisión”, expresó.
La víctima acudió ante la Comisión de Honestidad y Justicia de Morena a denunciar lo ocurrido en 1998 y ofreció ser tercera interesada en la queja de oficio que se sigue contra Salgado Macedonio. Su caso fue cerrado por la Fiscalía de Guerrero, pues prescribió al ocurrir hace 22 años.
Basilia acudió en noviembre pasado ante la Fiscalía General de la República y ahí dio testimonio de lo ocurrido. La carpeta fue enviada a la Fiscalía de Guerrero que informó que el delito prescribió pero aún analiza otra carpeta de investigación de 2016.
“En 1998 yo quise ir con mi esposo a una reunión, nos fuimos un viernes porque la reunión era el sábado en Chilpancingo, me voy con él y en el autobús que nos subimos en Técpan, él se da cuenta que iba su ex suegra y me dice que se irá separado porque nuestra relación estaba oculta. Sus hijas todavía no sabían de nuestra relación. Yo me quedé en Acapulco y me quedo en la casa de un taxista que me vio sola llorando y me dio la confianza de ir con su familia. Al otro día temprano le pregunté si conocía a Félix salgado macedonio, me dice que si, y que sabía donde vivía. Eso para mí fue un alivio y mi pareja me había dicho que la reunión que tenía era con él”.
Añadió que al día siguiente, “llego a su casa y me abre la puerta un escolta y me dice que pase. Sale y le digo que necesito, que si no va a ir a la reunión donde estará mi pareja en Chilpancingo, que me preste 100 pesos para regresarme a Técpan”.
“Pensé que estaba tranquila y contenta porque ya no estaba en la calle, me quedo observando la casa, ahora por el trauma no lo recuerdo ni los colores ni nada”.
Recordó que a los 15 minutos de verlo, “sale con otra cara y frotándose la nariz, se me acerca y empieza a atacarme. Fue algo que no pude evitar, era una jovencita sin mucha fuerza ante un hombre tan monstruoso. Era un señor grandote, fuerte y la verdad no pude hacer nada. Me viola y cuando termina, todo quejumbroso se levanta el pantalón, busca su cartera y me tira 100 pesos en la cara. Para mí fue lo peor, tuve que tomar el dinero y no ha pasado un día que esto se pueda borrar de mi mente”, relató la víctima de Salgado Macedonio.
(milenio.com)