Los cruces masivos de migrantes podrían volver a ocurrir, según lo expresado por el delegado del Instituto Nacional de Migración (INM) en Baja California, David Pérez-Tejada Padilla, en respuesta al refuerzo de seguridad en el Ejido Jacumé, un poblado fronterizo en el municipio de Tecate, como se registró el domingo por la mañana.
En diciembre de 2023, por esa zona se reportaron hasta 800 cruces irregulares al día, pero disminuyeron debido a los operativos de vigilancia y al campamento que se instaló en febrero, con la presencia de la Guardia Nacional y personal del INM.
Actualmente, se han registrado unos 70 cruces irregulares, lo que sugiere la posibilidad de que vuelvan a ocurrir en las zonas urbanas. Pérez-Tejada Padilla considera esta situación preferible, ya que reduce el riesgo de muerte para los migrantes.
En consecuencia, los cruces masivos podrían volver a ocurrir en la canalización del Río Tijuana y en la Zona Norte.
Ante esto, consideró necesario incrementar la presencia policial. Se descarta un cierre de la frontera como el ocurrido a finales de 2023, dado que existe una constante comunicación con las autoridades norteamericanas.
Un ejemplo de esta situación es lo que ocurre en el fraccionamiento Terrazas de Mendoza en Playas de Tijuana, cuyas calles y patios de hogares particulares colindan con el muro de Estados Unidos. Allí también se ha observado recientemente un aumento en los cruces irregulares.
Los vecinos expresaron su preocupación ante la presencia del crimen organizado y grupos de migrantes, lo que ha llevado a una mayor presencia de elementos de la Guardia Nacional y del INM en el acceso al área.
“No queremos que la población de Tijuana sufra las consecuencias de los grupos criminales que están trasladando a los migrantes”, concluyó Pérez-Tejada.
(milenio.com)