Washington.- El número de muertos por el descarrilamiento de un tren Amtrak se elevó hoy a ocho luego de que socorristas hallaron el cuerpo de un pasajero entre los escombros del primer vagón en clase de negocios, que resultó el más dañado.
El alcalde de Filadelfia, Michael Nutter, declinó dar el nombre de la víctima hasta que su identidad sea confirmada por sus familiares, pero sostuvo que con el hallazgo del cuerpo queda finalmente contabilizada la totalidad de pasajeros y tripulantes.
Un total de 46 pasajeros del tren regional noreste continúan hospitalizados, de acuerdo con Nutter.
Las autoridades confirmaron en rueda de prensa que el servicio ferroviario de pasajeros en el corredor entre las ciudades de Washington y Nueva York, uno de los más transitados del país, podría restablecerse plenamente el martes.
Por el momento, el servicio opera entre Washington y Filadelfia, con un transborde entre esta última ciudad y Nueva York.
El descubrimiento del octavo cuerpo tuvo lugar en medio de informaciones discrepantes sobre el curso de la investigación.
Nutter dijo en rueda de prensa que el operador del tren, el ingeniero Brandon Bostian, de 32 años, se rehusó a hablar con los investigadores y pidió la presencia de un abogado.
Pero su abogado, Robert Goggin, dijo a la cadena ABC esta mañana que Bostian habló con los investigadores durante varias horas, aunque no recuerda el momento exacto del descarrilamiento ni si aplicó los frenos de emergencia.
Bostian sufrió lesiones en el cuello y 14 suturas en el cráneo a raíz del impacto.
El tren regional del noreste Amtrak viajaba a 169 kilómetros por hora, más del doble de la velocidad recomendada en la curva donde perdió el control, según confirmaron ayer las autoridades.
Robert Summwalt, miembro del equipo investigador de la Junta Nacional de Seguridad en el Transporte (NTSB), señaló que el tren debió haber tomado la curva a una velocidad máxima de 80 kilómetros por hora.
Aunque los frenos de emergencia redujeron la velocidad del tren a 163 kilómetros por hora, no fue suficiente para evitar el descarrilamiento.
El corredor noreste de la línea de trenes suburbanos Amtrak, comunica la capital estadunidense con la ciudad de Boston y es la más ocupada en Estados Unidos con 11.6 millones de usuarios durante el año fiscal de 2014.