Lima.- Perú ordenó el retiro temporal de su embajador en Chile, Fernando Rojas, y entregó una nota diplomática a autoridades chilenas en la que expresó “su más firme rechazo” por las acciones de espionaje en contra de su seguridad nacional.
El viceministro encargado y director general de América de la Cancillería peruana convocó al encargado de Negocios de la República de Chile para entregarle la nota diplomática, en la que reitera que están debidamente acreditadas las acciones de espionaje.
En el documento, el Ministerio de Relaciones Exteriores de Perú afirmó además que los actos de espionaje “no se condicen con el espíritu de colaboración y buena vecindad que deben guiar las relaciones entre ambos países”.
Asimismo, resaltó la urgencia de recibir una pronta respuesta, que contenga los resultados de la investigación interna que se está realizando en Chile, así como garantías de que no se volverán a repetir actos de espionaje, señaló la cancillería en un comunicado.
Tras el anuncio peruano del retiro de su embajador, el canciller chileno Heraldo Muñoz sostuvo que “esta es una decisión que le compete exclusivamente” a ese país”, y añadió que responderán “como corresponde, por los canales diplomáticos”.
“Es una decisión soberana del Perú, de modo que no vamos a comentar las decisiones de otros países (…) Hemos recibido una nueva nota diplomática y la vamos a responder como corresponde, por los canales diplomáticos”, indicó Muñoz, citado por el diario chileno La Tercera.
El canciller manifestó que “Chile ha mantenido una actitud sobria y serena en relación a la situación con Perú” y puntualizó que el gobierno chileno “no realiza, ni ampara, ni acepta acciones de espionaje en otros países ni en el nuestro”.
El 20 de febrero pasado, el gobierno de Lima denunció que tres miembros de la Marina de Guerra peruana fueron pagados para espiar en favor de Chile entre 2005 y 2012. Los tres militares se encuentran detenidos en Perú.