La Comisión Etíope de Derechos Humanos informó este jueves (26.08.2021) que al menos 150 personas murieron la semana pasada en el oeste del país, en un ataque perpetrado por un grupo armado un día después de “una retirada de las fuerzas de seguridad” del sector de Gida Kiremu. Tras esta acción, hubo represalias que dejaron al menos otros 60 muertos.
La entidad aseguró que residentes del distrito Gida Kiremu, en la región de Oromiya, dijeron a los investigadores que los responsables pertenecían al Ejército de Liberación Oromo (OLA), una escisión del Frente de Liberación Oromo (OLF). El ataque, basado puramente “en la identidad étnica” del poblado, según el comunicado, dejó 150 personas fallecidas el pasado 18 de agosto.
La comisión estatal agregó que desde entonces ha habido ataques de represalia, que han dejado al menos 60 muertos. “Estamos todavía tratando de confirmar el número de personas que fallecieron, quiénes lanzaron los ataques y qué fue exactamente lo que ocurrió”, dijo Zalalem Sorim, portavoz del gobierno regional. Todo indica choques étnicos entre grupos oromo, mayoritarios en Etiopía, y comunidades amhara.
Versiones contrapuestas
El OLA descartó tajantemente que haya asesinado a civiles, y aseguró que los incidentes descritos por la comisión son en realidad enfrentamientos entre sus milicianos y unidades amhara. “Cuando llegaron nuestras fuerzas, las tropas amhara comenzaron un intercambio de disparos”, dijeron los altos mandos del Ejército de Liberación Oromo en un comunicado.
Un residente amhara sostuvo que los combatientes del OLA “abrieron fuego apenas llegaron, y nosotros tratamos de defendernos y disparamos de vuelta”. Las fuerzas rebeldes del Tigray habían anunciado anteriormente que estaban en conversaciones para forjar una alianza con el OLA, en un intento por poner más presión al gobierno de Etiopía, enfrascado en una guerra contra los rebeldes tigreños desde el año pasado.
(dw.com)