>Recordará que desde la administración de Vicente Fox, muchos de los políticos que hoy ocupan cargos de elección popular, demandaron que los candidatos presidenciales fueran sujetos de estudio físicos y psicológicos.
Esto debido a las versiones sobre la presunta situación de bipolaridad que se dijo padecía el ex presidente Fox.
Incluso al inicio de su administración, el periodista Jorge Ramos de la cadena Univisión, preguntó a Fox en una entrevista en Los Pinos si él tomaba prozac.
La pregunta molestó a Fox y a Marta Sahagún que en ese momento dieron por concluida la entrevista.
Las actitudes de Fox y algunas de sus decisiones como Jefe de Estado, alentaron las especulaciones sobre su estado de salud mental.
Ahora que Josefina Vázquez Mota sufrió mareos en un evento público, el debate sobre la obligatoriedad de conocer el estado físico y mental de los candidatos presidenciales cobró fuerza nuevamente.
Dadas las condiciones políticas que vive el país no estaría por demás que los partidos políticos tomaran en serio la exigencia de que sus candidatos hicieran publico su estado de salud.
Lo malo del asunto es que la petición seria y formal para conocer el estado físico y mental de nuestros presidenciables, han sido desdeñada y suplantada por los propios partidos que en su afán de negar esta información que debería de ser pública, condicionan la petición a exámenes de polígrafo, toxicológico y los que a usted se le puedan ocurrir.
En una de esas, no sería mala idea que en la próxima reforma política se estableciera la obligación de que la información del estado físico y mental de quienes aspiran a gobernar nuestro país fueran un requisito para obtener la candidatura.
¿Usted lo no cree necesario?.
>¡Vaya problema que tendrá que resolver el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación!.
Un grupo de ex candidatos de todos los partidos, mayoritariamente del PAN, impugnaron la decisión de quitarles la candidatura para otorgárselas a mujeres a fin de que los partidos pudieran cumplir con la llamada cuota de género.
Los inconformes argumentan que ganaron sus procesos internos en una contienda democrática, de acuerdo a los estatutos del partido, y en muchos de los cuales no se inscribieron mujeres.
La pregunta es si el Tribunal Electoral concederá mayor peso legal a la obligación de cumplir con una cuota de género o protegerá los derechos políticos de los militantes que cumplieron con todos los requisitos legales para obtener una candidatura..
Los recursos están interpuestos en cada una de las cinco salas regionales del Tribunal por lo que éstas no tendrán descanso de semana santa para desahogar todos los asuntos que tienen pendientes.
>Lo mejor que le puede pasar a Jesús Alí de la Torre es evitar que el gobernador –es un decir- Andrés Granier se sume a su campaña.
Granier ha dejado el estado de Tabasco en una situación de postración que será mejor para el candidato priísta marcar su distancia desde ya.
Aviso: por razones de fuerza mayor nos leeremos hasta el próximo lunes