A lo mejor porque es Semana Santa o para no quemarse en el infierno, el caso es que ni la Secretaría de Gobernación ni el Instituto Federal Electoral (IFE), se atreven a sancionar al aguerrido vocero de la Arquidiócesis, Hugo Valdemar Romero.
Tanto Gobernación como el IFE reconocen que Valdemar violó flagrantemente la Fracción I del artículo 29 de la Ley de Asociaciones Religiosas que prohíbe expresamente “asociarse con fines políticos, así como realizar proselitismo o propaganda de cualquier tipo a favor o en contra de candidato, partido o asociación política algunos’’.
Valdemar llamó “fascista’’ al PRD y lo acusó de “maicear’’ a la Suprema Corte de Justicia para que convalidaran las uniones homosexuales y su derecho a la adopción.
El PRD presentó una queja ante el IFE y este a su vez envió la queja a la Secretaría de Gobernación para que sancionara el caso.
El pasado, 11 de abril, Paulo Tort. director General de Asociaciones Religiosas de la Secretaría de Gobernación, envió al IFE un oficio en el que le notifica que la dependencia no tiene facultades para aplicar algún tipo de sanción al vocero.
Ayer, sin embargo, el IFE le revió a Gobernación y en voz del consejero Marco Antonio Baños, declaró que el Cofipe establece claramente la responsabilidad de la dependencia para sancionar a los ministros de culto que violen la Ley de Asociaciones Religiosas.
¿Quién pues, como Pilatos, se está lavando las manos en este asunto que, sin duda, sentará un precedente?
En los prolegómenos de su precampaña en busca de un segundo mandato presidencial, Barak Obama recurre nuevamente a la zanahoria para atraer el voto latino, definitivo para su llegada a la Casa Blanca.
Obama incumplió su oferta de lograr una nueva política migratoria; el Congreso rechazó una propuesta para legalizar a los migrantes que estudiaran en universidades o realizaran servicios en las fuerzas armadas estadounidenses.
El gobierno de Obama no ha sido lo que se esperaba; la recuperación económica se encuentra anquilosada, no hubo reforma migratoria y para colmo republicanos y demócratas se alistan para dar una batalla que se espera épica por el presupuesto ¡para este 2011!
Vaya, ya ni los diputados mexicanos se tardan tanto.
Así que otraaaaa vezzz serán los inmigrantes, principalmente latinos, que son el grupo más numeroso, el mercado de un presidente que no convence ni a los suyos.
Ya le salió un nuevo sparring al secretario de Trabajo, Javier Lozano Alarcón.
Se trata del flamante vocero de PRI –el cargo es de nueva creación-, David Penchyna, quien no desaprovechó la primera entrevista y le mandó los primeros jabs al Secretario de Trabajo.
Este respondió rápido, vía Twitter, en donde reiteró que es el PRI el que lucra política y electoralmente con la fallida reforma laboral.
Más aún, Lozano prometió que dará a conocer información del por qué Penchyna esta rabiosón en contra del gobierno federal panista.
¡Y eso que apenas fue un round de “estudio’’!