>Los representantes de los partidos políticos ante el Instituto Federal Electoral y la comisión del propio IFE encargada de la organización de los debates entre presidenciables, acordaron tener el primer encuentro el 6 de mayo próximo.
Será en domingo a las 20:00 horas, una vez que se haya acabado la actividad deportiva que generalmente tiene la atención de la mayoría de los mexicanos los fines de semanas.
Falta poco más de un mes para la fecha, pero desde ya los equipos de los candidatos preparan la estrategia; lo interesante del caso será cómo los tres candidatos hombres tratan a la candidata mujer.
Y no será un asunto sencillo pues quién de los tres, Enrique Peña Nieto, Andrés Manuel López Obrador o Gabriel Quadri de la Torre podría “tratar mal” a Josefina Vázquez Mota sin correr el riesgo de se calificado de misógino.
Y cómo defenderá su posición la panista sin que recurrir al género sea su principal carta de presentación pues ya está visto que eso no le será suficiente para ganar la Presidencia.
Si no sucede un milagro, Peña Nieto llegará con ventaja al debate; de su estrategia en este primer encuentro dependerá si la distancia entre él y sus rivales se amplía o se reduce.
Desde ahora se puede adelantar que el polemista será López Obrador, acostumbrado a lanzar auténticos obuses en sus cuestionamientos; claro que eso podría cambiar ahora que el tabasqueño le ha dado por el amor y paz.
Será el primer de dos debates; difícilmente, el equipo de Peña Nieto aceptará más por la simple regla de que quién va arriba impone las condiciones.
>El IFE aprobó el tope de campaña para los candidatos presidenciales que será de 336 millones de pesos, una cantidad que se antoja gorda para los tiempos que vive el país y considerando que los partidos político no pagan los spots de radio y televisión.
El Instituto pondrá especial atención en que estos topes no sean rebasados ni que haya dinero de origen dudoso, como es el justificado temor de autoridades judiciales y electorales.
¿De verdad habrá mecanismos suficientes para evitarlo?
>La decisión de reducir el convenio entre el PRI y el Verde Ecologista en el Distrito Federal se debió no a diferencias entre los partidos sino entre Beatriz Paredes Rangel y Cuauhtémoc Gutiérrez de la Torre.
Sucede que entre la candidata del PRI a la jefatura de gobierno y el diputado federal y líder de uno de los grupos más importantes del tricolor defeño, nomás no hubo santo que acercara las posiciones.
De la Torre se sintió menospreciado por el PRI, que lo colocó en el lugar número 15 de la lista de candidatos plurinominales al Senado, sin posibilidad de alcanzar el escaño; ahora buscará la presidencia del tricolor en el DF.
Por eso, el PRI y el Verde decidieron competir juntos en 16 de las 16 delegaciones y en 26 de 40 distritos locales, cuando el acuerdo original era ir juntos por todas las posiciones.